martes, 22 de enero de 2013

El necesario boom del CicloTurismo



España es una potencia en términos de turismo, convirtiéndose éste en una importante fuente de ingresos para el país, concretamente el 10% del PIB, y estando situados actualmente en la segunda posición mundial por ingresos, detrás de EEUU. Sin embargo parece que aunque subimos ligeramente en ingresos, últimamente disminuye el número de turistas que entran en el país.

Si desde los años sesenta el principal bastión del turismo español son las playas, desde los años ochenta se ha comenzado a comercializar otros tipos de turismo, como pueda ser el rural, el urbano, el cultural, el deportivo y el de tercera edad. Todo viene bien con tal de conseguir ingresos que mejoren la balanza comercial nacional. 


En unos momentos de recesión como los que vivimos, toda ayuda vendría bien. Como botón de muestra valga el dato de que sin los ingresos del turismo entre enero y agosto de 2012, el déficit por cuenta corriente español sería un 70% superior.

Esto indica que si consiguiéramos más turistas podríamos aún mejorar esa situación. ¿Pero cómo podemos conseguir más turistas?

Según el último ranking de competitividad turística conocido, estaríamos perdiendo puestos. Suiza, Alemania y Francia son los líderes, lo que quiere decir que están poniendo las bases para mejorar con respecto a España. Estos países están apostando por mejorar su competitividad turística, mientras nosotros nos dejamos llevar por el tirón que actualmente tenemos, cuidando menos que esos países los aspectos que nos permitan seguir siendo la potencia turística que somos. ¿Qué tienen en común esos tres países, además de una buena capacidad empresarial?: La bicicleta. Vale, habrá quien diga que esto es casualidad. Pero quizás no tanta. Habrá quien diga que eso no es lo más importante, y seguramente tendrán razón, pero que duda cabe que todo suma, además de que nuestro país reúne muchas de las características intrínsecas que una ruta cicloturista necesita: paisajes, cultura, gastronomía y alojamiento. Y no lo estamos sabiendo aprovechar.

Unas de las principales razones para dar los primeros puestos a estos tres países era: "Un buen transporte e infraestructuras turísticas". Casualmente, o no tan casualmente, son los tres países que más fuerte han apostado por la implantación de redes de turismo ciclista y en el caso de Francia y Alemania, los más involucrados en la red Eurovelo, dado que tienen varias rutas que pasan por su país.

FRANCIA
En el caso de Francia, entre 2008 y 2010, el cicloturismo creó 16.500 empleos directos. Además generó casi dos mil millones de euros anuales y llegaron un millón de turistas al país dispuestos a montar en bicicleta.
Vía ciclista en Las Landas

La red de tren francesa está bien adaptada a la bicicleta, con amplia información y accesibilidad

Francia está dispuesta a convertirse en el primer destinatario de ciclistas mundial y a fe que se lo están tomando en serio, para impulsarlo han creado incluso un sello, el Accueil Vélo, un sello de certificación de adaptación ciclista que se ofrece bajo determinadas condiciones a establecimientos hoteleros y albergues, oficinas de turismo, empresarios de la bicicleta (tiendas, reparaciones, alquileres, etc.) o lugares de interés para visitar. Se les concede el sello siempre que estén adaptados a los ciclistas.

Un ejemplo de marketing turístico de la bicicleta en Francia es este reciente documento.

ALEMANIA
Alemania nos gana a los demás con diferencia. Su plan nacional 2002-2012 impulsó de modo decidido la bicicleta en general y el cicloturismo no quedó exento de este impulso. 

La ADFC (la coordinadora alemana en defensa de la bicicleta) presentaba el último estudio anual, el de 2011 en el que dejaba patente las rutas preferidas por los ciclistas, el gasto por día de cada uno de ellos y las edades más habituales, destacando las personas mayores y con altos ingresos, aunque esto en España pueda sorprender. También han sacado recientemente una publicación con rutas que genera envidia sana para nosotros. El Ministerio Federal de Transporte también apuesta por la bicicleta en su web


Por otro lado, según se publicaba en Süddeutsche Zeitung, n.º 59 del 12 de marzo de 2010, el sector turístico realizó una cifra de negocios de 9.000 millones de euros con los cicloturistas. La cifra de los establecimientos de “Bett & Bike” (cama + bici) certificados por el ADFC había aumentado, alcanzando más de 5.000 en 3.412 localidades.
Bicis en un tren regional alemán. El ciclista se sienta al lado de su bici

La compañía alemana de ferrocarriles Deutsche Bahn tiene unas condiciones bastante mejores que las españolas, aunque para usos urbanos apuestan por sus propias bicicletas públicas (gestionadas por esta comercializadora de ferrocarril), las famosas Call a bike, que ya celebran su décimo aniversario.

SUIZA
En el país alpino han desarrollado el proyecto Veloland, una red de rutas nacionales, regionales y locales. La primera inversión de 10 millones en 1998 para hacer la red nacional de nueve rutas ya se habían amortizado sobradamente en 2002, con 240 millones de ingresos por turismo debido al cicloturismo en esta red. Es decir, en cuatro años se había conseguido superar 24 veces la inversión primaria. Luego siguió la red regional, con 70 rutas y, luego, un número similar de rutas locales. La información de las rutas y los mapas es muy completa, tanto en la web como en las propias rutas.

Es una clara demostración de la rentabilidad del cicloturismo en un tiempo relativamente corto, que en España deberíamos considerar muy seriamente dado el enorme potencial paisajístico, gastronómico y cultural que tenemos.
Macro-aparcamiento de bicicletas en la estación de tren de Basilea

Eso sí, para llevar la bici en el tren en Suiza son todo facilidades

LA BICI EN BALEARES
El único ejemplo similar para nuestro país es el de las Islas Baleares, donde hay algunas rutas temáticas para bicicletas, si bien no van acompañadas de ejecución ni adecuación.

La afluencia de cicloturistas y ciclodeportistas es de 90.000 al año, que genera más de 64 millones de euros (cada año) según el gobierno balear, habiendo hoteles especializados en este tipo de turistas. También se suelen fletar aviones charter enteros desde países como Alemania. Aún así, comparado con las cifras de los países anteriormente nombrados u otros de centro y norte de Europa, son relativamente pobres, pero nos ofrecen un espejo de lo que podría ser España si se pusieran los medios.

Todo esto no significa que el gobierno balear apueste por la bicicleta, de hecho la seguridad es más bien mala, registrándose todos los años muertes de cicloturistas extranjeros en las islas (pese a llevar casco, por supuesto). En realidad el milagro balear surge más bien por el impulso de operadoras de transporte principalmente alemanas. Es decir, el cicloturismo aumenta pese a la desacertada o inexistente política de la Administración Balear, cuando, a poco que hiciera, el retorno de la inversión sería extraordinariamente alto.

 LAS VIAS VERDES
Un buen ejemplo de gestión son las Vias Verdes, una red de más de 2000 kilómetros de antiguas vías de tren readaptadas para la marcha a pie y en bicicleta. Es una lástima que no se les pueda sacar partido atrayendo a cicloturistas extranjeros que estarían encantados de transitarlas y conocerlas.

QUE PIENSAN EN EUROPA DEL CICLOTURISMO ESPAÑOL
En una encuesta realizada a los distintos delegados de la Federación de Ciclistas Europeos en 2007, estos delegados no tenían intención de venir a España para hacer rutas cicloturistas y las dos principales razones eran la poca accesibilidad de las bicicletas a los trenes españoles y la obligatoriedad del casco para circular por vías interurbanas.
¿Tiene sentido la obligatoriedad del casco
para este tipo de actividad tranquila?

Las consultas más habituales que recibimos a través del correo electrónico en los últimos años por parte de los cicloturistas extranjeros son sobre estas dos cuestiones que no comprenden. Cuando les contamos la realidad, el rechazo a venir a nuestro país es lamentablemente inmediato.

Por desgracia, rutas tan reconocidas como el Camino de Santiago, son francamente disuasorias para los ciclistas extranjeros, debido a los problemas que genera el transporte de las bicicletas por el país y una legislación tan restrictiva para su uso. Según los datos más actuales, los peregrinos españoles son alrededor del 48% del total, y el restante 52% de los demás países del mundo. No hay datos por tipo de peregrinaje (a pie o en bici), pero el conteo realizado por el autor de este blog en lugares distintos del Camino y en años diferentes arrojaron porcentajes de ciclistas extranjeros menores siempre al 10% (es decir, de cada cien ciclistas en el Camino, menos de diez eran extranjeros). La bicicleta en este país se percibe como disuasoria.

Mucho de los cicloturistas españoles también procuran irse al extranjero. Yo soy un ejemplo. No estoy en disposición de quedarme tirado en alguna estación porque algún interventor considere que estorbo o no hay espacio y no pueda continuar mi ruta y mis vacaciones, prefiriendo la seguridad que en este sentido me ofrecen cualquiera de los países limítrofes, incluyendo a Portugal. Tampoco estoy en disposición de soportar la presión que supone la actual legislación española cuando estoy de vacaciones, que se supone que uno va a disfrutar, así que cuando puedo, me largo a Francia o Portugal, donde todo son facilidades.

BICI + TREN
Mi amigo Antonio Llópez publicaba hace poco un artículo sobre el cicloturismo como solución al cierre de líneas de media distancia cuya lectura recomiendo.
Los trenes españoles se olvidan de las bicicletas

La negativa actitud de la compañía RENFE ante la bicicleta, con normas restrictivas y cada vez menos unidades que admitan bicicletas, unido a la nula apuesta del gobierno central para regular la práctica de la combinación bicicleta+tren y su falta de apuesta por el tren normal, nos ha llevado a lo que parece una programada desaparición de esta combinación intermodal tan habitual en el resto de Europa.

Puede resultar de interés esta presentación que hice en su día al respecto en un congreso.

CASCO
España es el único país europeo con la obligatoriedad del uso del casco en vías interurbanas. Eso incluye el uso cicloturista en las carreteras secundarias, caminos y vías ciclistas, como por ejemplo las Vías Verdes. Para gente que usa la bici en plan de paseo, de auténtico turismo (cercano a la naturaleza y el entorno), de ir haciendo fotografías, parar a menudo para ver los paisajes y a hablar con la gente del lugar, el uso obligatorio del casco es algo que no entienden. 

Los extranjeros no entienden la obligatoriedad del casco,
y la mayor parte prefiere no exponerse a una multa
Una medida que se hizo presuntamente para proteger al ciclista, cuando lo que necesitamos protección es frente a los vehículos a motor, que ha demostrado no haber servido para su propósito (los números de muertos en bicicleta siguen igual que cuando se instauró la medida o incluso subiendo ligeramente, mientras que los de los vehículos a motor han bajado enormemente) y que es vista como extraña en toda Europa, debería ser replanteada inmediatamente si se quiere promocionar el cicloturismo en España entre la población extranjera. 

CONCLUSIÓN
Son muchas las razones para apostar por el turismo extranjero en bicicleta:
  • Activar el crecimiento económico en zonas rurales
  • Amortización rápida de una inversión comparativamente mucho más pequeña.
  • Dinamización de empleos nuevos que harían crecer la economía
  • Sostenibilidad ambiental. 
  • Baja huella ecológica turística.
  • Aprovechamiento de la infraestructura turística existente para meses en los que otros turismos decrecen (playa, rural, cultural, etc.)
  • Ayudaría a impulsar el uso de la bicicleta en nuestro propio país.
 
Hay, por lo tanto, una preocupante discrepancia entre las cifras del aumento del cicloturismo que nos vienen llegando desde toda Europa y la actitud de este país hacia la bicicleta, llegándose al punto de perder a los cicloturistas españoles que preferimos los países vecinos por su mejor oferta infraestructural, de accesibilidad al tren y su ausencia de obligaciones absurdas.

Estamos perdiendo un tremendo potencial que encierra el cicloturismo, por sus posibilidades de diversificación turística, y eso no nos lo podemos seguir permitiendo.

Información adicional:
Informe sobre cicloturismo 2014